Das „Dorf der freien Frauen“ Jinwar in Rojava in Nordsyrien
Mit der Hälfte der Erlöse von Lucha Amada 3 / A Luta Continua wird die Kurdische Frauenbewegung unterstützt, im speziellen der Aufbau eines Frauendorfes in Rojava.
Im Frühjahrs 2017 begannen die Bauarbeiten für das „Dorf der freien Frauen“ Jinwar in Rojava in Nordsyrien. Raus: Gebaut werden sollen neben dreißig Häusern und dem großen Gemeinschaftsgarten auch eine Schule für Kinder, eine Frauenakademie, ein Kunst- und Kulturzentrum und ein Gesundheitszentrum mit Fokus auf natürliche Medizin. Das kommunale Leben bildet das Zentrum des Dorfes und dieses Verständnis soll sich auch in der Architektur und Infrastruktur Jinwars wiederfinden. In der Mitte des Dorfes soll es einen Ort für Versammlungen der Kommune geben, ausserdem einen Teegarten und andere Orte um zusammenzukommen, gemeinsam zu leben und zu arbeiten.
Jinwar wird und ist bereits ein Ort der Frauen, ein Ort, an dem Frauen zusammenkommen, leben und arbeiten, auf der Grundlage der Vision eines freien, solidarischen Lebens. Ein Projekt, das tief mit den drei grundlegenden Prinzipien des Demokratischen Konföderalismus verbunden ist: Frauenbefreiung, Demokratie und Ökologie.
Jinwar lehrt uns eine ganzheitliche Perspektive auf die Revolution. Die Frauen, die mit der Waffe in der Hand gegen den IS kämpfen und die Frauen, die in der Hitze der Sonne mit ihren Händen Lehmziegel formen, sind Teil der selben Revolution – sie kämpfen an unterschiedlichen Fronten für die selbe Vision einer befreiten Gesellschaft.
La mitad de los ingresos de Lucha Amada 3 / A Luta Continua se destinará a apoyar el movimiento de mujeres kurdas, en particular la construcción de una aldea de mujeres en Rojava.
En la primavera de 2017 comenzaron las obras de construcción de la "Aldea de las Mujeres Libres" Jinwar en Rojava, en el norte de Siria. Se construirán treinta casas y el gran jardín comunitario, así como una escuela para niños, una academia para mujeres, un centro artístico y cultural y un centro de salud centrado en la medicina natural. La vida comunitaria constituye el centro de la aldea y esta concepción debe reflejarse en la arquitectura y las infraestructuras de Jinwar. En el centro del pueblo habrá un lugar para las reuniones de la comunidad, un jardín de té y otros lugares para reunirse, vivir y trabajar juntos.
Jinwar será, y ya es, un lugar de mujeres, un lugar en el que las mujeres se reúnen, viven y trabajan basándose en la visión de una vida libre y solidaria. Un proyecto profundamente vinculado a los tres principios fundamentales del Confederalismo Democrático: la liberación de la mujer, la democracia y la ecología.
Jinwar nos enseña una perspectiva entera (holística) de la revolución. Las mujeres que luchan contra el IS a punta de pistola y las que moldean ladrillos de barro con sus manos al calor del sol forman parte de la misma revolución, luchando en distintos frentes por la misma visión de una sociedad liberada.